El viernes pasado T nos apuntó a un curso de maquillaje con la firma de cosméticos MAC en el Corte Inglés de Bilbao a las 17h00. I y T trabajaban hasta las tres de la tarde, así que decidimos comer algo rápido por la city, por eso de no entretenernos.
-"Chicas, llego tarde, no os imagináis la caravana que hay a la altura de Sondika!"-T desesperada en su coche.
-"Yo estoy igual, el Txorierri, ¡colapsado!"-I nos informaba como podía de sus escasos avances.
Al fin, sobre las cuatro menos cuarto, habiendo aparcado con la mayor suerte del mundo, nos fuimos derechitas al Eme, nada mejor que un sandwich y una torre para ir bien al curso.
-"Que os pongo chicas?"-La camarera de lo más agradable y sonriente que he visto últimamente.
-"4 sandwiches, 4 torres y 4 botellines de agua, por favor"
-"¿Para comer ahora?"
-"Sí"
Ni nos habíamos quitado el abrigo, alguna ni siquiera había apoyado el bolso, yo incluso seguía con las gafas de sol puestas cuando aparece con los cuatro sandwiches envueltos en esas servilletas que se vuelven translúcidas al breve contacto con el estupendo sandwich, y nosotras que no sabíamos ni como agarrarlo. Gracias a nuestra infancia con el Twister y el Tetris, conseguimos que una sujetara los bolsos, la otra pusiera los abrigos colgados, mientras las otras dos sujetaban la comida que cada vez chorreaba más mayonesa.
-"¡¡¡Pero queeeee bueno está esto!!!"- I que era el primero que probaba en su vida se quedó sin habla!
-"jajaja, mira la que estas liando, que te estas comiendo hasta la servilleta!- I en pleno ataque de risa viendome comer mi sandwich de servilleta transparente que se había fusionado con el pan artesano.
-"¿No lo habías probado nunca?-la camarera se dirigía a I asombrada
-"No, nunca!"
-"Pues tu debes de ser por lo menos de ¡Santurce!"-la camarera seguia sorprendida
-"jajaja qué va, soy de Bilbao, pero nunca había venido!"- I se lo toma todo de muy buen humor.
Y de repente, en plena conversación: "CHICAAAASS CORREEEDDD ¡¡¡¡UNA MESA LIBRE!!!!" A ver, no es que yo sea una vaga, pero después de andar corriendo de lado a lado una se cansa. Y tuvimos que correr porque el bar Eme tiene dos, y bien digo DOS mesas en todo el local para sentarse, y las cuatro como locas a hacernos con una de ellas. Nuestra camarera, que ya casi se hizo del grupo, nos sirvió esta vez las torres en cuatro platos, viendo que ya nos habíamos asentado en el campamento base (véase la mesa con los bolsos, los abrigos, los móviles...y por cierto, un detalle, que faltando una silla, la misma camarera nos acercase una de la otra mesa)
Nos comimos T y yo la torre con una ansiedad increíble, mientras M e I disfrutaban como niñas a pesar de que cada cinco minutos mirábamos el reloj. Y de aquí, dijimos adiós a la camarera, para acercarnos al local que hay justo a escasos metros del Eme y tomarnos un café.
CONTINUARÁ...
BAR EME
C/ General Concha, 5. Bilbao
Este bar se merece uno, no unos cuantos posts! Y si ya os comenté en uno anterior (este mismo) lo buenísimos que estaban los sandwiches, también os recomiendo su prima, la torre: con el mismo pan artesano de los sandwiches, pero untado hasta que se deshace de una salsa entre mayonesa y picante, junto con unas hojas de lechuga y unas anchoas en salazón, la torre es el segundo mejor pintxo de este bar.
Fue curioso ir al baño ("gira al derecha. Tu otra derecha!") y al pasar por la cocina ver esas torres inmensas de pan de molde que ellos mismos elaboran.
4 sandwiches+4 torres+4 botellines de agua= 26,80€
Mi pulso era pésimo: el abrigo, el bolso, la cámara, el sandwich...
De ahí esta foto tan mala.
Las torres bien ordenaditas para las cuatro,
en sus correspondientes platitos.
Primer plano de mi torre a medio devorar.
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