Lo mejor de trabajar con amigos, es que luego te vas con ellos a comer, y una comida de trabajo se convierte en algo ameno y divertido (bueno, también hay momentos de enfado, pero se me pasan rápido). Sobre las dos y media de ayer jueves, mi querido amigo J me invitó a comer, sugiriendo "un restaurante nuevo que hace esquina cerca de la Alhóndiga..." hasta que vió mi cara de susto, y me preguntó la razón. Pues es que a La Mary, si puedo evitarlo, prefiero ¡no ir! y la pega es que no le puedo remitir al post que escribí (y que os enlazo de nuevo aqui) para explicarle el porqué asi que oootra vez a contar la misma batalla.
Menos mal que le convencí para ir al Domenicos, al ladito de La Mary, y al que hacia como 8 años que no iba. Por aquel entonces, el restaurante italiano me parecia un restaurante de lujo, con una cocina muy elaborada, y digno de ocasiones muy especiales. Sin embargo ese mito se me fue ayer mismo, aunque no me dejó con mal sabor de boca. Quizás no era tan espectacular como mi cerebro lo recordaba, pero la verdad es que tanto la atención como la cocina como el precio me parecieron de lo mejor del centro bilbaino.
Menú del día por 12,50€ (2,50€ más que La Mary, y mejor calidad, y sin esperar colas!), donde habia ensaladas, crema de verduras, pasta, pizza, carne y pescado. De lo más completo por ese precio! Yo que soy muy tradicional y con eso de que hay que empezar a cuidarse, pedí la ensalada de la casa: mucho colorido, muchos productos, y buena cantidad. No era una ensalada muy elaborada, pero se comia bien. Y para fastidiar este comienzo de dieta, pizza blanca con queso azul y nueces (no podia ser mejor combinación). Hacia tiempo que no comia una pizza tan buena, con la masa fina y crujiente, en su punto, con mucho mucho queso azul (otro vicio mas, ¡el roquefort! ya he perdido la cuenta de los vicios que he nombrado) y unas cuantas nueces de gran tamaño, que se agradece ver lo que comes, normalmente tienen la mania en los restaurantes de triturar todo. Y para terminar con la "dieta" profiteroles con chocolate: pasables. A ver, ¿¿qué cuesta derretir algo de chocolate y poner algo más casero que esos liquidos marrones industriales que no tienen más que E-167 E-486 colorantes y vete-tu-a-saber-qué-más?? Me he inventado los "E" pero seguro que tienen uno parecido.
DOMENICOS
C/ Alameda Recalde, 54. Bilbao
Comer en el centro de Bilbao por 12,50€, con una atención impecable, un sitio tranquilo y acogedor, y sin presiones del staff es casi imposible. Así que Domenicos se ha convertido en un de mis sitios a tener muy en cuenta para esas comidas express al medio dia y para recomendar a mis amigos "oficinistas" de la zona. Además cuentan con platos especificos para celiacos.
Desde luego, a la carta será más caro, pero también más elaborado, y sin embargo la atención seguro que es igual.
Menú de dos platos+postre+café+bebida 12,50€
La ensalada llena de colorines.
La pizza bianca con queso azul y nueces, sin duda, lo mejor del dia!
Profiteroles, que me resultaron igual de industriales y sosos que los de La Mary.
Una pena.
Cortado descafeinado de cafetera, ¡con corazón!
¡Todo un detalle de Domenicos!
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