Hay quien cree en Dios, otros en la Virgen, y yo, en el Karma, en esa causa-efecto que provoca que en mi vida decida tomar pequeñas decisiones, pequeñas acciones para ayudar a otros que hacen que yo me sienta mejor. Dedicarle una sonrisa a un niño que nadie mira a las siete de la mañana en el metro; cederle el asiento a una chica embarazada en el bus; ayudarle a un señor a sacar la Barik (ticket de transporte publico de Bilbao); o echarle un cable a ese local que necesita difusión y comunicación a través del blog. Después de un mes de octubre horrible, noviembre está siendo dulce, amable, y lleno de regalos en forma de sonrisas y detalles. Y uno de ellos, fue una gran comida con mis padres en Aizian, perfecta compañia, perfecto servicio, y perfectos platos. ¿Seguimos?
Llegamos a las tres, de nuestros respectivos trabajos, y nos recibió una amable camarera con una sonrisa, nos acompañó a nuestra mesa. Una segunda chica, nos ofreció las bebidas y el pan, de semillas para mí, mi preferido junto con el de maíz. Y con ello, el primer entrante, seguido de una colección de platos maravillosos.
Mejillones al vapor sobre mousse de anchoas, gelatina de Campari y helado de naranja.
Mira que no soy muy amiga de los mejillones, pero fue probar el primero, y morir con la explosión de sabores y texturas. Me encantó lo cuidado que estaban los mejillones, sin una traza de cáscaras, sin barbas, y perfectamente cocinados; me encantó la mousse de anchoas; me encantó mezclar todo con el helado, la mousse, la gelatina y el mejillón, y notar cómo se mezclan los sabores en la boca. ¡Maravilloso!
Tallarines de chipirón con alioli de calabaza y velo de su tinta
Aquí, ya me tenian conquistada con los ingredientes, pero no esperaba que me sorprendiera. Llegó una nueva camarera, que al igual que la anterior, nos explicó el plato, genial, encantadora, casi la invito a que se siente con nosotros. Unas tiras de chipirón, con el punto justo de cocción, que mezclamos con el alioli y con el velo de su tinta, para dejarnos llevar y disfrutar de su sabor. Se convirtió en segundos en mi plato favorito.
Vieira asada con alcachofas en tres texturas
En serio, ¿¿los de Aizian tienen espías en mi casa?? ¿¿o es que mis padres les contaron mis platos preferidos?? Eso pensé cuando llegó la vieira asada con una de mis verduras preferidas: la alcachofa, así que me dio lo mismo en crema, confitada o en tiras, y encima, con espárragos y setas! #tomaya
Taco de bacalao confitado, sus callos encebollados y caldo concentrado de garbanzos
Empezamos con el principal de pescado: un taco de bacalao de Giraldo, con unas lascas que casi se nos saltan las lágrimas a los tres. Lo que nunca había probado es lo de los callos de bacalao encebollados, un sabor curioso, a bacalao concentrado, quizás demasiado fuerte para mi gusto. Pero vamos, no para el de mis padres, que se comieron alegremente lo que yo no quise!
Rabo deshuesado con crema de cebolleta y verduras salteadas.
No tengo ni idea de la cantidad de horas que ha estado haciéndose el rabo: esto es slow food, y lo demás son tonterías. Josemi Olazabalaga lleva tatuado SLOW FOOD en su camisa de chef, y eso se nota en sus platos, en concreto en éste plato, esa salsa que parecía caramelo, esa carne que se deshacía con el tenedor, y esa crema de cebolla que estaba para comerse a cucharadas. MI padre decidió cambiar el blanco por un tinto, y a la chica que se lo sirvió, se le escurrió un poco en la mesa. Ni sé la de veces que la pobre se disculpó, menudo agobio, y mis padres, sonrisa de por medio, diciéndole que no pasaba nada, que así, se daban cuenta (y yo también, que en ese momento estaba en mi mundo perdido), que entre tanta perfección, también hay un hueco para lo humano. No pasa nada, y la complicidad y las risas que vinieron con la pobre camarera, eso, hizo más cercana nuestra experiencia.
Torrija de pan caramelizada con helado de arroz con leche.
Bueno, bueno, bueno, buenoooooooooo momentazo de la tarde: llenos a más no poder, inflados, felices por una comida maravillosa con los mejores padres del mundo mundial, un sol maravilloso en la city, pero sin ganas de mas. Hasta que vino la torrija. Perdón: LA TORRIJA DE JOSEMI (en mayúsculas y negrita), una rebanada de brioche empapada, caramelizada con mantequilla y azúcar, y rematada por una crema inglesa con una capa de azúcar pasado por plancha. MA-ra-VI-llo-SO. Debéis ir, sólo por probar este postre, desde hoy, mi plato preferido de Aizian.
FIN
No pudo ir mejor la comida, mis padres disfrutaron, y yo, más aún de verlos a ellos, y disfrutar de los platos de Aizian. Sin duda el slow food está siendo cada vez más una tendencia que espero no pase de moda, al menos, Josemi y su equipo sabrán mantenerlo y dejar el listón altísimo. Destacar el trabajo de las tres chicas que estaban en sala, que nos trataron como en casa, e hicieron que la experiencia fuera muy agradable.
¿El precio? Ni idea, esta vez, iba de invitada, pero pagaría este menú con los ojos cerrados. Sí que recuerdo que mi padre dejó 5€ de propina "y porque no tengo más!"
Joder, hay veces que parece que estamos conectados. Hoy mismo he estado hablando con Crisiscreativa que tenemos que ir al Aizian, tengo muy buenos recuerdos.
ResponderEliminar[AbueloCebolleta mode=on ]Hace años, en mi época de universidad, estuve trabajando en el Sheraton dando desayunos. Éramos los invasores del salón del Aizian. Me acuerdo de estar en medio del servicio y Josemi y compañía llegaban para empezar a preparar sus cosas mientras nosotros estábamos con los cafés y zumos de naranja (eso de llegar a las 5 y ponerte a hacer 50 litros de zumo de naranja nunca se me olvidará). Es más, recuerdo alguna vez que llegué y todavía andaban por ahí el sumiller, la jefa de sala y más gente. ¡Que divertida era la vida en la hostelería! Y que mal pagaban... La verdad es que en aquella época me lo pasé muy bien y además aprendí mucho. [AbueloCebolleta mode=off]
jajajajaja! conexión interbloguera! :)
EliminarQué risas con tu relato de abuelo cebolleta! sois lo más
B.
Hola Blackie.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu post y por contar tu experiencia en Aizian. Nos alegra saber que lo que con tanta ilusión hacemos gusta.
Muchas gracias.
Gure Sukalkintza Cocina Vasca en Bizkaia
Un placer! Fue una experiencia maravillosa, que seguro que repito :)
EliminarUn abrazo a todo el equipo! :)
B.
Que buena pinta todooooo! Buen artículo Blackie!!
ResponderEliminarMuchas gracias!! la verdad que estaba delicioso, y las cantidades, contundentes! :)
EliminarAcabo de leer el artículo con detenimiento y no debería haberlo hecho... me muero de envidia!!!! Quiero ir quiero ir quiero ir!!! Necesito una excusa pero ya mismo!!
ResponderEliminarDile a uno que tú y yo sabemos que te lleve! Y luego, que nos lo cuente en su blog! :) jajaja
EliminarB.
Carol, yo también muero por una torrija... Pero cuando fui el otro día teníamos surtido de postres y además de la torrija probé también una tarta de queso azul, que vamos!!! Aun mejor!!!
ResponderEliminarDile a Josemi que el próximo día te guarde una ración!!
Abrazo