Lo bueno de quedar con I y con T, que un martes o un jueves tonto puede ser el mejor día de la semana. Ríete tú de los sábados de desfase teniendo a dos de tus mejores amigas a tu lado, encima con el día inspirado en tonterías varias. #callaquememuerodelarisa
Parece que siempre acabamos las tres alrededor de una mesa, simplemente por celebrar que estamos juntas, que a pesar de que no podemos vernos tanto como quisiéramos, nos tenemos las unas a las otras. Y claro, qué mejor celebración que una cenita por Bilbao. En esta ocasión, nos acercamos hasta "Un Señor de Bilbao", un restaurante escondido en el callejón de Particular de Indautxu, que cuenta con unos menús ya elaborados, que a las perezosas como yo nos salva de pensar en la carta. Leimos los dos menús, el USB y el menú Chuletón, y finalmente nos decidimos por el segundo, no por el chuletón, sino por el postre: ¡coulant de chocolate!
Tras servirnos el agua, el camarero vino con el aperitivo, unas croquetas de tamaño considerable, que nos apaciguaron un poco el hambre. Sabrosas, con buena bechamel, pero el fallo fue que dos de ellas no estaban suficientemente calientes por dentro, quizás fritas con demasiada velocidad, que hizo que el interior no se calentara. Al menos nos tocó una a I y la otra a mi.
Empezamos con los entrantes: terrina de foie con mermelada de ciruelas negras, sin duda un entrante que nos encantó, el foie estaba a temperatura ambiente, perfecto para poder saborearlo, y acompañado de suficientes panecillos de pasas. No sé que pasa siempre con estos panes, que te plantan un pedazo de ración de foie, y cuatro míseros panecillos, chico, que no son tan caros. (No fue el caso de USB). Estábamos degustando el último bocado del foie, cuando llegó la ensalada de ventresca, una cama de láminas de tomate, con una buena montaña de ventresca y cebolla fina. Es la segunda vez que pruebo esta ensalada en USB y siempre digo lo mismo: perfecta. Un plato sencillo, al que no hay que complicar con tonterias, pero sí mejorar, como en este caso, que no se andan con tonterias, y se preocupan de eso, de presentar lo mejor posible algo que de por sí, si va con buena materia prima, ya es bueno.
En el plato principal teníamos como opción compartir el chuletón entre dos personas o comer chipirones sobre cebolla confitada, y viendo que una cena entre semana, siendo laborable al día siguiente, preferimos una cena más ligera, y las tres pedimos los chipirones. Un plato con tres piezas medianas, tersos, y con muy buen sabor, bien acompañados por la cebolla. Quizás para mi gusto, demasiada salsa del agua de la cebolla y el aceite, cuestión de gustos.
Charlabamos tranquilamente mientras veíamos cómo poco a poco se llenaba el comedor, un proveedor con el que trabajo también estaba de cena, y se acercó a la nuestra a saludar, justo cuando aparece con el camarero la razón de ese menú: el coulant de chocolate. T casi llora de la emoción con ese pequeño bizcocho de sabor intenso a chocolate negro, que se mezclaba con el helado de ¿cookies? y con el fondo de sabor avainillado. Las tres felices con el coulant.
UN SEÑOR DE BILBAO
Particular de Indautxu, Bilbao.
Sin duda tira para atrás el ambiente un tanto exagerado y emperifollado de muchos que se juntan en esa calle a tomar unos vinos. Y eso es lo que hace pensar que USB es un local inalcanzable para algunos bolsillos, algo nada más lejos de la realidad. Situado en pleno centro bilbaíno, cuenta con una carta sencilla, pero de calidad con unos menús variados para adapatarse a todo el mundo. Me quedé con ganas de ver el famoso chuletón, de un menú de 36€.
Menú chuletón, pero sin chuletón, 36€ más el agua aparte.
Me encantan tus explicaciones, más clara no puedes ser...Yo quiero ir un día a tomar el menú del día, un viernes de estos me dejo caer por allí!
ResponderEliminarBesos