Me pido el café como me da la gana. En Abaroa.

Creo que me voy a replantear mi profesión. Bueno, más que mi profesión, a replantearme cómo la he enfocado. Quizás deberia dejar de lado el marketing y la comunicación y dedicarme a la gestión de clientes. Más bien, a asesorar en la gestión de clientes. 

Después de una reunión surrealista, en un entorno surrealista, acabo con J (ni color con S) en el restaurante Euskalsena Abaroa de Artxanda. Si, un sitio extraño, pero casi a las cuatro de la tarde, y por esa zona, pocas alternativas quedaban. En fin, allí que nos sentamos, una camarera nos acerca la carta, y sin dejarla escapar, le pedimos los platos.

Dos ensaladas para empezar, la de J mixta, con los ingredientes habituales, pero con un punto de color con la lombarda, oye, pues no está mal. La mía, de queso fresco, algo raro, ya que no soy muy fan de este queso, pero as anchoas, ¡me privan! Seguimos con ensaladas embolsadas, pero con buena combinación de tomate, anchoas queso y nuez, algo ligero, pero diferente a la mixta de siempre. A la hora de pedir los segundos, J no se decidía entre las salchichas en salsa y el lomo con salsa roquefort, así que yo que soy un cielo (cuando quiero) pedí el lomo para que pudiera comer de ambos. Y chica, menuda decepción: las salchichas nadaban en una especie de salsa de algún tipo de licor/vino/asaber y una capa de aceite que daba pena. Vamos digno de un capitulo de "pesadilla en la cocina". Pena que estuve poco espabilada, y no les hice cambiar el plato. Del lomo, pues eso, tres filetes de lomo fresco, empanados con una crema de roquefort, que ni frío ni calor, demasiado suave para ese tipo de queso, además de fría.

Pero el remate vino en los postres. Arroz con leche para mí, J ya no quería postre, así que mientras traian los granitos de arroz flotando en leche y canela, pedimos dos cafés:

-"Yo un cortado"- J fan de los cortados.

-"Pues yo cortado, pero descafeinado"

-"Pues vaya, para pedir un descafeinado..."

Miro a la camarera, y mientras le lanzo rayos X con la mirada, no sé que fuerza interior me agarra por dentro, y me limito a contestarla con un 

-"Pues lo quiero descafeinado, ¿pasa algo?"

Oye, ¡ya lo que me faltaba! Que se ponga la camarera a juzgar lo que quiero tomarme. Yo alucino, de verdad, que luego este tipo de empresarios, o camareros no entiendan ni acepten quejas, cuando tratan a los clientes como les a la gana, y no bien precisamente. Pedía un café, no su opinión sobre qué le parece que me tome un descafeinado. 

EUSKAL SENA ABAROA

www.abaroa.net

Carretera Enekuri-Artxanda, 59.

Arrancó bien la comida con las ensaladas, fue empeorando con los segundos, y remató la faena la camarera entrometida con un postre que daba pena. Sinceramente, me esperaba mucho más, aunque fuese el menú del día. 

Menú del día 11,50€

¿¿Qué leches es esa capa de aceite flotando??

Bajo el maaaar, bajoo el maarrr hay miles de granitos de arrooozzzzz

Mi cortado, DESCAFEINADO.

Motosierra, como Mixta te saca una carcajada.

Hace cosa de un año estabamos las chicas de la city estudiando para algo, que ahora mismo no recuerdo, pero que seguro que era un coñazo. El caso es que de repente, me entró la risa, al acordarme de un anuncio de Mixta: el hombre de la motosierra. Ya ves tú que tonteria, un muñeco, reclamando su puesto como malo malisimo, frente al mismisimo ¡¡HOMBRE DEL SACO!!

Enfin, una tonteria, que hizo que nos doliera la tripa de reirnos durante un par de días. Y hoy, quiero compartirlo con vosotros. 

-"(...) el hombre del saco, el hombre del saco...¿¿qué va a hacer, tirarte una patata??"

G'Vine, ofertas y hermanos.

Mi prima está embarazada. Por segunda vez, y tras la pequeñaja, la familia ha entrado en el segundo debate más estupido de la historia tras el "¿a quien quieres más a mamá o a papá?". Y ese es el "mejor que sea niña, para que jueguen juntas!"

Vamos, yo no cambio a mi hermano por nada del mundo, con él he jugado con muñecas (bueno, él le cortaba el pelo a escondidas), a baloncesto con balones de fútbol, a ping pong con bolas de colores, hemos pintado paredes con ceras Manley por casa, hemos lanzado con los cañones del barco pirata de los Playmobil bolas por la ventana....Repito, NO cambio a mi hermanito por nada del mundo. Por que hoy es el día que aunque no viva ya en Bilbao, seguimos igual, tan amigos, tan cómplices y tan tan tan aaaayyy como lo quiero. 

El finde, fui a Madrid a verle, y no pude reirme más con él: hasta en el super. Estamos los dos mirando ginebras, y me dice:

-"Uy, mira, G'Vine está de oferta!"

Sisisisisisi, de oferta. ¡¡¡¡3 CÉNTIMOS DE REBAJA!!!!  Vamos, con eso que nos ahorramos nos da hasta para las tónicas. Uy no, no nos da. Pero para seguir riendonos, eso, seguro. Pero no por la ginebra, sino por el gran hermano que tengo.

Ala, ya me ha salido un post homenaje a A. Y de paso, mirad bien las ofertas, que menudo engaño. Por cierto, la pequeñaja tendrá que compartir muñecas con su nuevo hermanito. 

PD: por que te echo mucho de menos, por que eres el mejor hermano del mundo, por que me encanta que nos digan lo mucho que nos parecemos, y nos pregunten a ver si somos mellizos. Por que eres el único que me entiende cuando le digo al platanito que corra, o que sonrie conmigo al ver un monito trepar por un árbol. Te quiero mucho, A.

Protocolo en Barakaldo, cena en Novotel

Cada vez que mis compañeros de trabajo tienen un problema en internet, o con un ordenador, lo primero que hacen es llamarme a mi. Que no es que yo sea la responsable de informática de la empresa, (de hecho soy la de comunicación y coordinación cultural), pero soy la más joven, y la única que controla "el feisbus", "el tuinter" o es capaz de configurar las cuentas de correo de todos en el movil. Pero antes de irme a vivir a internet, yo veia la tele, y esas cosas, como hace la gente normal. Con un sofá y todo! De hecho, me acuerdo de una peli que han emitido muy pocas veces, como unas 452.467 veces en Telecinco, si hombre, esa del Richard Gere y la prostituta, ¡"Pretty woman"! Una peli con una escena genial, dónde enseñan a Julia Roberts a utilizar los cubiertos. Pues menos mal que algo me acordaba, por que menuda encerrona la de esta semana.

Resulta que hay unas jornadas entre mi empresa y mis compañeros los franceses ("les gabaches" en la oficina) esta semana, y yo, pensaba (ingenua de mi), que unicamente me correspondia la organización y supervisión. PUES NO. Pringada hasta para cenar: ala, vete a Novotel, que estan allí todos, y cenas con ellos. A ver, una cena que parecia una boda, con mesas redondas de 10 personas...vamos que allí que fui, me siento en mi mesa, y veo la colección de cubiertos y panes, y vasos, y de todo. Menos mal, que vi "Pretty Woman".

Primer plato, ensalada templada de verduras a la plancha, cogemos los cubiertos exteriores, el pan de la izquierda, la copa de vino (no, esto no, que yo conduzco!), y ala, nos ponemos a disfrutar. La ensalda, de mi ya querida y asidua en las comidas, Florette, pues bien, como siempre. Pero lo importante, las verduras a la plancha, estaban muy buenas: templadas, con un toque dorado de la plancha, chorrito de aceite, y sin pasarse. El calabacín, al dente, sin ser puré, algo que agradecí mucho.

-"Oye *** el pan cual hay que coger, ¿el de la izquierda o el de la derecha?"- Menos mal que vivo en internet, y pude asegurarme de que era el de la izquierda!

Seguia la cena con taco de bacalao a la plancha con pimientos rojos, una delicia: al punto de cocción y de sal, algo importante, que hay veces que te tiras toda la noche con la botella de agua en la cama. Lascas blancas, con buen sabor y bien acompañadas de pimientos asados. Me gusta mucho el bacalao, así que no es muy complicado preparar este pescado, sobre todo aquí en el norte. Lo gracioso era ver cómo los franceses acaban volviendose locos intentando entender porqué les llamamos pez a los animalitos del mar, y pescado cuando están en el plato. Para ellos, todo es "poisson" (cuidado con "poison", ¡eso es veneno!).

Para terminar, algo muy francés, crêpe rellena de chocolate negro y salsa de frutos rojos. Sinceramente, me esperaba algo más, entre que estaba frio, que un triste crêpe, con un tamaño diminuto, y el chocolate demasiado liquido, pues deslució un poco. Mira que por aqui somos muy dados a la exageración, y sin embargo los crêpes, era pequeñitos, algo que en Francia, no ocurre. Una pena.

RESTAURANTE DEL HOTEL NOVOTEL.

C/ Rio castaños, 2. Barakaldo

No tengo ni idea de lo que costó la cena, pero la verdad es que tanto la atención, el servicio y la comida fueron impecables. Sí que me fijé en que habia un menú del día por 17€, con muy buena pinta. Creo que en Barakaldo es un muy buen lugar para comidas o cenas de empresas o de cualquiera que vaya al BEC o a una reunión en Barakaldo.

Mucho tenedor y mucho cuchillo...

Ensalada de verduras asadas.

Buenisimo bacalao.

La decepción de la cena: el postre.

Arlobi, 20x3. ¡Felicidades papá!

Soy fan de mi padre. Fan absoluta. De un padre atento, que nos ha llevado a la guarde, al cole, al medico; que se tira una tarde planchando los vestidos de su hija de veintitantos, que acompaña con absoluta paciencia a sus hijos y su mujer por todo el centro madrileño para ir de compras; que es capaz de tirarse 9 horas al volante para llegar a Paris y saludar a su hijo...¡vamos, amor de hija!

Pero es que encima, el tío es un artistas con el bacalao al pil-pil, a la vizcaína, cordero asado, cualquier verdura, pescados de cualquier modo, y hasta se curra él solo (bueno, yo le ayudo a vaciarlo) un txangurro a la donostiarra como dios manda. Ah, y sin olvidar el arroz con leche. Ahí, gana a cualquier cocinero de pantalla pequeña, de estrella michelín o de nombre impronunciable.

Y claro, el fin de semana mi padre cumplía por tercera vez los 20 (chistes de mi padre), y tras un debate en casa de dónde ir a comer, mi madre soltó: "Arlobi!" que chica, a mi padre y a mi, nos sonó a estornudo, la verdad. Pues no, resulta que Arlobi es un restaurante a 2,5km del Gorbea, vamos en un escondite de Álaba donde no lo encontraba ni el recién estrenado Tom-Tom

Mi imaginación va más rápido que la realidad, y nada mas llegar, ya me estaba imaginando una cocina tradicional, sin mucha elaboración. El comedor, sencillo, con una ventanita que apenas dejaba entrar algo de luz, y una capacidad como para unas veinte personas; dos mesas ocupadas, y la nuestra, la tercera. Un amable camarero, nos acercó la carta, y nos comentó que fuera de ella habia hongos salteados, y algún plato de caza. Vamos, que mi padre casi llora de la emoción por lo de la caza, y yo, casi lloro por los hongos. Si es que somos de tal palo tal astilla. Y mi madre riendose de los dos. 

Pues nada, ensalada de pulpo para arrancar, con unos trozos perfectamente cocidos de pulpo, patatas del huerto que veíamos desde la ventana. Muy buen presagio de lo que vendría después. Tras la ensalada, los hongos:

-"Cuidado que el plato quema "- el camarero avisador

-"Aaayyy"-

-"Pero ¿¿tú para qué tocas?? Si te acaban de decir que quema!"- las madres son madres

-"Ya, pero era para comprobarlo"-

Pues sí, el plato quemaba, por algo lo traia con una servilleta. Pero antes que el plato, llegó un olor profundo a monte, a otoño, a hongos con un toque de ajo y guindilla. No nos hizo falta más que probarlos y los tres nos mirábamos disfrutando de ese sabor único. El listón iba subiendo plato a plato.

Nos preparábamos para los platos de caza, los tres sin saber si nos gustarían o no, la verdad, pero no podíamos irnos de allí sin probarlo. Habia pato azulón, solo dos raciones, así que decidimos sacar las dos, y una tercera de ciervo asado, por eso de probar el ciervo. Llegaron los platos, con una presentación perfecta, sencilla, pero con lo importante bien presente. A mi padre y a mi nos sirvieron media ración de pato a cada uno, para que pudiésemos compartir sin problema. Esta vez no toqué el plato, que igualmente, quemaba, pero era algo que agradecimos, así el pato no se enfriaba. Un muslo asado, jugoso, y de muy buen sabor, algo más fuerte que el pato que he probado hasta ahora, pero muy característico. La pechuga, a la plancha, hacia que el plato mezclara dos texturas, potenciando los sabores, acompañados con un puré suave y ácido de manzana.

Impresionados los tres con las buenas cantidades, presentaciones y sabor de los platos, esperábamos curiosos el ciervo. Media ración para el cumpleañero, y media para mí, con tres trozos bien cortados y muy bien presentados. El olor, maravilloso, a carne asada, a monte, como los hongos. Por que ir a comer es cosa de varios sentidos: primero sientes ese olor que te penetra, luego ver la carne rosada en el interior, pero perfectamente sellada, hace que al gusto solo le quede rematar la faena. Al primer bocado a mi padre le resultó algo fuerte de sabor, pero tras el segundo, quedó encantado. Como a mi madre y a mi, que nos encantó, y que acabamos entre las dos. Una carne tersa, sin grasa, de un sabor fuerte, pero agradable, y sin florituras ni cosas que tapen el ingrediente principal.

Maravillados con la comida, de repente, me acordé del arroz con leche de mi padre, de lo bueno que está, y de los boles que aun quedan en el frigo. Pues oye, parece que lo nuestro es obsesión: hojaldre relleno de arroz con leche y tarta de canela. Toma ya. Los dos postres buenísimos, cuidados al detalle, pero ¡me quedo con el arroz con leche de mi querido padre!

ARLOBI

C/ Elizalde 21, Sarria. Álava.

Un lugar privilegiado donde perderse, comer en otoño maravillas como los hongos salteados, o cualquier tipo de caza de las que tienen fuera de carta. Es uno de esos lugares, donde es mejor comer con las especialidades o sugerencias del día. Merece la pena. Una carta sencilla, unos seis siete entrantes, mismo numero de carnes y pescados, y unos pocos postres, suficiente para salir con una muy buena sensación y con ganas de volver.

Cumpleaños familiar, con botella de vino, por menos de 150€ los tres.

Ensalada de pulpo, ¡perfecta!

Hongos salteados. Los habia en revuelto, pero tan buen producto, 

merece la pena comerlo sin más alicientes que los propios hongos.

Pato azulón

Ciervo, oye, un descubrimiento

Tarta de canela, un vicio...

Hojaldre relleno de arroz con leche, casi tan bueno como el de mi padre.

Donibane, menú del día en Barakaldo y rebelión

Yo de verdad, cada vez entiendo menos a los hombres. Esta semana, me ha pasado de todo: desde un ex que vuelve (qué pesado es por dios!) tras seis años en silencio, a proveedores y empleados que en vez de venir a trabajar parece que se van de ligoteo. 

Empezamos por el primero, un cansino que cuando te van mal las cosas no quiere saber de ti. Seis años después, con un CV algo más abultado, y un cargo suficientemente importante como para que reaparezca con noquierosaber qué intenciones. Y lo otros tres, es como para pegarles un grito, o un tortazo, lo que más vergüenza les dé. Me alegro del puesto que tengo, de lo que he logrado por mi misma, con menos de 30 años, y con un equipo de profesionales a mi cargo que me llevan todos unos cuantos años. Pero me entristece tener que demostrar día a día mi trabajo y mi capacidad ante los hombres, aunque peor aun es tener que hacerlo ante las mujeres.

Tanto tiempo, tanta lucha por la igualdad, para que venga una petarda y se salte protocolos y cargos al grito de "LAS MUJERES PRIMERO". ¿¿Pero no queríamos igualdad?? Y peleando por esa igualdad, me tocó discutir por una comida, por querer pagar mi parte, que para eso trabajo, ¡leches! 

La dichosa comida, fue en Donibane, en Barakaldo, una sidrería al lado del Ayuntamiento (horroroso, por cierto, menudo edificio), donde por las prisas tuvimos que conformarnos con el menú del día, un menú sencillo, pero de comida casera y de buen servicio. Empecé por la ensalada de cogollos, mayonesa y anchoas. Tenia endivias, tomate, y ¡hasta pepinillos! La verdad es que hacia tiempo que no comia cogollos, y con anchoas y bonito están deliciosos, por eso, en este plato la verdad, me sobraba la mayonesa, y escaseaban las anchoas (en realidad, solo había dos, y además de lata de las malas)

Seguido, la alternativa a un bacalao con tomate era hamburguesa con jamón serrano. Y el pescado, si es al pil-pil, sin duda lo hubiera preferido, pero con tomate, no me la juego. Cuando apareció el plato, me sorprendió la presentación, en torre, donde el primer piso eran unas patatas en finas rodajas, hamburguesa en su punto, jugosa, y de buen sabor, coronado por dos hermosas lonchas de jamón serrano a la plancha. La verdad, mucho mejor de lo que esperaba.

Para finalizar, no miraba más que mi reloj, presionaba a mis compañeros para ir a una reunión, pero claro, ninguno queria moverse con un hojaldre relleno de crema encima de la mesa. La verdad es que los pobres lo engulleron al grito de "QUE OS DEIS PRISA!". Con la lengua fuera, llegamos puntuales a la reunión, pude coordinar mi trabajo, organizar a mi equipo, y dejar todo a punto para la sesión del día siguiente.

DONIBANE

http://www.donibaneasador.com

C/ San Juan, 15. Barakaldo.

Un lugar de lo más centrico, donde comer un menú del dia sin pretensiones, pero con calidad, buen servicio y mejor precio. Por 12€ con Iva incluido, tres primeros, tres segundos a elegir y postre. Quizás no sea de los lugares más "chic" de Barakaldo, ni sus platos sean muy elaborados, pero a veces, una busca eso: comer bien, y saber lo que hay en el plato.

Menú del día, 12€

Ensalada con mayonesa (sobraba)

Montadito de patatas, hamburguesa y jamón. (del bueno)

Hojaldre con crema (menuda semana llevo!)

Kellogg's y la politica de precios.

Cuando no puedes mejorar tu producto, cuando tu política de distribución y de comunicación parece que funcionan, peor aun asi tus ventas bajan, quizás sea otro factor el que influye. ¿El primero en el que pensar? La politica de precios, si hacemos un análisis interno, y la competencia, si lo hacemos externo.

Y esto es lo que le ha pasado a la multinacional americana Kellogg's, que viendo como sus ventas se veian devoradas por las marcas de distribuidor (marcas blancas), ha lanzado una ofensiva, a lo bestia. Tocando lo más peligroso: el precio. Porque una vez que eso se modifica, dificilmente podrán elevarlo sin que el consumidor perciba algun cambio o mejora, que para él sea sustancialmente significativo como para justificar de nuevo ese aumento.

Pues nada, a ver qué pasa con Kellogg's y ver si sus ventas aumentan con esta fuerte campaña. 

Carne a la piedra, en Ballano.

La semana pasada I me puso los dientes largos contandome cómo habían encontrado boletus en su jardín. Vamos, ¡menudo premio! Muerta de envidia, el fin de semana nos fuimos a comer a Ballano, el Txakoli que está en Artxanda, y cuando la camarera nos acercó la carta, nos comentó que tenian hongos, por ser temporada. ¡Menuda alegría que me dio la buena mujer! Casi lloro y todo de la emoción, con el antojo que yo tenia. Así que nada, una fuente de hongos, cremosos, con un toque a ajo y guindilla, pero sin tapar el buen sabor del plato. 

No había mejor opción para continuar que un buen chuletón. La verdad que me encanta la cocina moderna, los nuevos sabores, texturas y formas, pero de vez en cuando, no hay nada mejor que un buen trozo de chuleta a la piedra. NO sabia que en Ballano servian este plato, y de tan buena calidad. SIn duda, de los chuletones más gruesos que he probado, al punto, tirando a poco hecho, como debe comerse la carne de calidad, y dejando que selle un poco sobre la piedra. Para comer zapatillas, mejor vamos a McDonalds. Acompañado de patatas (por mi, que dejen de servirlas, nunca las como) y con una ensalada que agradecí que no estuviera patrocinada por mi querida amiga Florette. 

Con un buen sabor de boca, y el chuletón sin rastro, quisimos terminar con un dulce: tarta de queso casera, con mermelada, casera; y un hojaldre relleno de crema, y con chocolate caliente, realmente bueno. Y digo bueno no por el chocolate, ni siquiera por la buena crema del relleno, sino de las láminas  de hojaldre, con un intenso sabor a mantequilla, crujientes y dulce en su justa medida. ¡Una comida de 10!

TXAKOLI BALLANO

Carretera Artxanda-Enekuri, 61. Artxanda-Sondika

Una carta sencilla y con no demasiados platos, pero la cantidad justa de entrantes, carnes y pescados. La verdad es que si son platos de calidad, no hace falta que haya miles de platos que ni acaban haciendose realidad más allá de la carta. Sin duda, un buen sitio en el que disfrutar de una comida sencilla, con sabor y buena calidad. Además, la camarera, a cada plato nos preguntaba si todo estaba bien, un detalle ver que se preocupan por los clientes, por cómo con una sonrisa te cambian el plato y los cubiertos y te sirven el siguiente. 

Hongos de temporada+ensalada mixta+chuletón 1kg+botella vino tinto y agua+dos postres: 94,49€

Increibles los hongos.

Ensalada mixta para acompañar la carne

Chuletón

Buen corte!

Hojaldre de postre

Tarta de queso

La mafia se sienta a la mesa (literal)

Sin duda a este restaurante teniamos que ir por una razón especial. Y esa razón era D y su taitantos cumpleaños, y como buen grupo mafioso que somos, la "famiglia"al completo alli que fuimos, a "La mafia se sienta a la mesa". Nada más entrar, la decoración nos encantó, los uniformes de los camareros eran un puntazo, ¡con tirantes incluidos!

Eramos nueve, y D que es muy vergonzoso, no quería presidir la mesa, así que todos huyeron a sentarse, cual juego de la sillita, quedándome yo en el lugar que nadie quería: el de Al Capone. Pues nada, así tengo mejor vista de los platos. Para arrancar tres ensaladas, una de queso de cabra, otra de foie y la tercera de verduras salteadas para los que ya han empezado con la #operacionbuenorra. La verdad es que estaban buenas las tres, misteriosamente (o no) se parecían a las de Taggliatella y Trastevere (misteriosamente también las tres son franquicias), y la única pega fue, que tardaron una hora en servirlas.

Para continuar, cada uno elegimos un plato, aquí nadie estaba dispuesto a compartir y no por falta de generosidad: unos por la dieta, solo comerían proteínas (y otros pasamos de pedir solomillo en un italiano), otros no querían ni ver una pizza, y yo, que soy la rara y Al Capone por una noche, se me había antojado carpaccio. La verdad es que los solomillos tenian buena pinta, y las patatas con cebolla también, pero estas últimas se quedaron en eso, en algo visual. Frias, sin sabor, y encima apelmazado, vamos dificil de digerir. Tampoco tuve mucha suerte eligiendo el carpaccio con foie, el cual parecia mantequilla: sin sabor, demasaido espeso, y con una untuosidad propia de la margarina, más que de unas laminas de foie micuit.

Menos mal que los "endings" suelen ser buenos y chocolateados, como el brownie (en homenaje a mi querido primo) con helado, BUENISIMO.

LA MAFIA SE SIENTA A LA MESA.

www.lamafia.es

C/Licenciado Poza, 57. Bilbao.

Una franquicia más de italianos, que ya empieza a tener casi la misma representación en restaurantes que los del grupo Mao. Pues eso, pasta con nosecuantas salsas precocinadas, ensaladas estandar, y camareros lentos. Un restaurante bonito en decoración, pero no sorprende en calidad.

La reunión mafiosa nos salió a 25€ cada uno, con cuatro botellas de vino (del que no recuerdo el nombre)

Ensalada de verduras salteadas para los de la dieta.

Ensalada de queso de cabra para el resto

...Y también de foie!

Solomillo con foie y masa de patata

Carpaccio con foie

¡Pizza!

Y el happy ending, se llama BROWNIE!

Summer wine

Y hoy, me ha dado por pensar en el verano, en las fresas, en el mar, en cómo me miras. 

Hoy, echo de menos el verano, tu camiseta blanca y esas gafas que no me dejan ver tus ojos. 

Hoy, quiero que sea verano.

Disfruta.

 

The bite, cenita con amigas.

Durante toda la semana no hago más que pensar en el fin de semana. Pero no en el sábado, ni en salir, sino en el viernes, en quedar con mis chicas, en una cenita tranquila mientras nos ponemos al día, o nos reimos de cualquier cosa. Y no hay alegria mejor que ir a buscar a dos buenas amigas al trabajo, T y My salian a las nueve, justo para irnos a cenar algo.

-"Pues yo tengo antojo de hamburguesa!"-My

Si, vale, genial, que tengan antojo de haburguesas, pero leches, estamos al lado del ayuntamiento de Bilbao, y chica, por aqui no me suena nada (decente).

-"Oye, vamos a The Bite, que tienen hamburguesas!"- T 

Allí que fuimos las tres, a comernos una hamburguesa. Habia una promoción de unos 2,5€ si no recuerdo mal, de hamburguesa con queso, tomate y lechuga, así estaba el local, ¡a tope! Pero nosotras pedimos una de la carta, con patatas incluidas, pan crujiente, que nos sorprendió gratamente, hamburguesa pasable, nada que destacar, pero bueno, con un buen chorro de mostaza, quedo perfecta. La verdad es que estoy acostumbrada a la carne de las hamburguesas de Florida, o las de Santa Rosalia,  pero por el precio, la hamburguesa de The Bite, es ¡perfecta!

Tras la hamburguesa, T y My pidieron un plato de tortitas con nata y chocolate y caramelo, una bomba, pero que les supo a gloria. No os imaginais lo contentas que pasamos una tarde tonta de viernes, con una hamburguesa con patatas y unas tortitas.

¿La pega? Los botellines de agua de 33cl, por dios, ¡QUE LOS DESTIERREN! 

The Bite 

C/Buenos Aires, Bilbao.

Un lugar agradable, cuidado, moderno, y con una muy buena atención por parte de los camareros, que siempre tienen una sonrisa. Y un concepto de restaurante low-cost de calidad, y sin pretensiones. A medio dia, puedes comer un entrante, plato principal y postre por 5,80€ con propuestas como arroz tres delicias, pollo asado, o guiso. Vamos, que encima, no es fast-food de terror. Nos encantó la carta para picar una tarde cerca de abando, sin tener que arruinarte a pintxos por Ledesma, sin duda, un buen sitio para cenar.

Hamburguesa+patatas+bebida= 7€

Tortitas 2,50€

Trio de hamburguesas!

Os juro que el color del alioli era verde! (estaba bueno, eh??)

Vicioooooo

007 Skyfall & Cocacola Zero

A Coca-cola sólo (sí, con tilde, qué pasa!!! soy una rebelde contra la RAE) le queda dar una vuelta de tuerca con los anuncios. Ya reconocemos todos la lata roja, la botella de curvas sinuosas, la tipografía copiada hasta la saciedad, Papá Nöel se convirtió en rojo... y en el top of mind de cualquier consumidor de bebidas de cola, aparece Coca-cola.

Por ello, y aprovechando el lanzamiento de la última entrega de Bond, James Bond, Coca-cola nos propone un juego: ¿eres capaz de convertirte en el agente secreto más conocido de la historia y así conseguir dos entradas para la película? Creo que lo mejor, es que os deje el video, y ya si eso, luego lo comentamos con un "vodka martini agitado, no revuelto", o con un kalimotxo, que para eso somos de Bilbao, y encima se mezcla con Coca-cola. ¡Ale, a disfrutar!

USB, ¡y no es un pendrive!

En Bilbao no se puede ir de pintxos antes de cenar. A ver, que se puede, pero luego o te bebes un bote entero de sales de Eno, o acabas empachado durante dos días. El fin de semana vinieron unos amigos de visita, y cómo no, las paradas obligatorias por Poza y Maestro Garcia Rivero, hicieron que llegáramos J y yo a la cena que teníamos reservada en USB (Un señor de Bilbao), sin mucho apetito.

De ahí que nos lanzáramos los dos a compartir una ensalada, un segundo para cada uno, y quizás un postre. Normalmente, me da por proba varios platos, que claro, luego viene la cuenta y me arrepiento, diciendome a mi misma, que esto, lo pago yo, y desde luego a este ritmo, el blog me llevará a la ruina económica.

Ya suele ser un clásico, el ir probando todas las ensaladas de ventresca que se me cruzan por el camino, y esta vez en USB no iba a ser menos. Acostumbrada a las cantidades industriales de la ensalada de Milagros, esta vez, me pareció algo escasa, sin embargo, el sabor, infinitamente mejor. Lascas de bonito tersas, con un color claro, y un sabor suave sin exceso a pescado, acompañado de finas rodajas de cebolleta (ojo, que NO cebolla). Y todo, con sobre unas láminas de tomate, de buen sabor, buen color, y sin piel. Detalle interesante para una ensalada donde la presentación, y la materia prima se lleva el 90% de la importancia del plato. Mientras esperábamos el segundo plato, y conversaba con J a voz suave, apareció un grupo de diez personas, a cada cual más escandaloso, con un tono tonto y estúpido, de esos que creia extinguido, pero que debe mantenerse vivo por la zona de Indautxu (una pena) y entre "Osea, maja, es que en el despacho, la secre no atiende al teléfono" "es que Jaime, le ha dicho a Alfon, que...blablabla" (todo con bolsos de CH sobre la mesa para que se vieran bien) llegaron los segundos. 

J, que tiene prohibido el marisco por prescripción médica, tiene cierto reparo a la hora de pedir cualquier cosa que vaya bajo el mar (tras mi pregunta indiscreta de que porqué siempre pedía carne), así que para él, entrecotte, al punto, tal y cómo le preguntó la camarera. Y yo, por llevar la contraria, unos chipirones a la plancha sobre cebolla pochada. La carne, con buen sabor, tierna, y al punto como le pedimos, y con toques crujientes, de las escamas de sal, algo indispensable en un buen entrecotte. Pero sin duda lo bueno llegó con los "chipis", que en plena temporada, es cuando hay que aprovechar, y si son buenos, tal y como dicen los grandes chefs, no deben lavarse mas que con agua por encima, a la plancha y ¡a disfrutar! Tres hermosos ejemplares con sus patitas crujientes, y sobre una cebolla pochada, caliente, que hizo que mantuvieran ese calor, y que no acabase comiendomelos fríos (como suele pasarme)

Llegados a este punto, apenas podíamos más, pero la carta de postres, era (es) de lo más sugerente, así que no pudimos resistirnos a una cuajada casera para J (la cual ni olí, lo siento, eso, los plátanos y los purés son mis kriptonitas), y una torrija al caramelo para mí. Puedo asegurar por la cara de mi acompañante, que la cuajada era de lo mejorcito, y os aseguro, que la torrija, cremosa, con un acabado crujiente por encima y acompañada de un helado de un fruto seco que no logramos reconocer, mereció la pena, a pesar de estar a reventar.

USB (UN SEÑOR DE BILBAO) 

http://www.unsenordebilbao.com

C/Particular de Indautxu, 8-10. Bilbao.

Un lugar peculiar, con una decoración entre tradicional, y moderna, con no mas de 16 mesas, ambiente cálido, y sonidos suaves que invitan a una comida/cena en calma, a menos que se te presente el club de pijos-de-jersey-al-hombro-y-marujas-con-camisas-de-Tommy al lado con sus "osea" "jo tia, de verdad" "menos mal que los niños están con la nanny". 

Y cuento esto, por que los restaurantes, asi como el cine, o las clases de econometría, no son mas que experiencias, y con esa experiencia y recuerdo es con lo que te quedas. Por ello, creo que mi experiencia (y ya van tres veces que lo digo) en USB se basó en un alto porcentaje en la comida, de escasa elaboración, pero gran presentación y grandes productos y materias primas, con el servicio y el ambiente. Así que no sólo en USB sino en TODOS los restaurantes deberian cuidar esos detalles, que si hace falta llamar la atención a unos papás que dejan sueltos cual fieras a los niños, pues se hace, o que si aparecen 10 petardos a gritos dejando claro que trabajan en despachos con secretarias, que hacen puente cuando ellos quieren por que son "jefes", pues chica, me revientan la cena. Por que no me interesa su vida, por que no aguanto a los soberbios, y por que ante todo, respeto a los demás. 

Ensalada+ dos segundos+ dos postres+ agua; rozando los 76€

Ensalada con tomates pelados.

¡Mis chipirones!

Carne, con pimientos, y patatas.

Torrijas.